domingo, 1 de marzo de 2009

Capitulo II “Ligada a ti”

Gwen se levanto con calma, de alguna forma se esperaba que esto ocurriera, siempre esperaba que esto ocurriera, desaparecer sin previo aviso era común en el comportamiento de su novio. Ahora aguardaba paciente a que las emociones acudieran a ella, su mente empezaba a habituarse a la secuencia, esta escena le resultaba tan recurrente como Navidad, o cualquiera de esas fiestas que no se vive todos los días, pero que sin embargo se mantienen en la mente por aquella subconciencia de que en algún momento ocurrirán. No quedaba más que esperar, ya sentía como las emociones hacían presa de ella, siempre del mismo modo, siempre en el mismo orden, primero la ira…
-Maldito imbecil- grito en su mente, mientras sus brazos temblaban por la furia que recorría su cuerpo - te dejare, esta vez no voy a esperarte, no volveré a ser esa idota que todo el mundo cree que puede pisotear, no de nuevo- tomo sus cosas rápidamente y salio de la habitación, pero al pasar por el vestíbulo el encargado la miro extrañado

- Señorita - la llamo-¿Se marcha?- pregunto cuando Gwen se voltio
-Asi es señor-respondió esta decidida
-pero…-intento decir
-¿Qué?- Gwen tenía prisa, sentía como la ira desaparecía de su cuerpo, si no se marchaba en ese preciso instante ya no lo haría
-El caballero, pago una semana por adelantado- demasiado tarde pensó Gwen
-¿Cundo lo hizo?
-mmmm, esta mañana muy temprano
-¿Dijo algo mas?
-Me temo que no
-entiendo, gracias por la información- se despidió mientras caminaba lentamente de vuelta a su habitación
-¿entonces se que da?- pregunto el encargado antes de que su joven inquilina se alejara lo suficiente para no escucharlo
-eso creo- respondió quedamente

-No debería haberme quedado- pensaba una y otra vez, mientras caminaba de un lado a otro, pero a pesar de la idea constante con que la acosaba su sentido común, ya había perdido toda voluntad por marcharse, nada había cambiado, él ya no estaba y el tener un techo pagado en un lugar maravilloso, no hacia ninguna diferencia, ¿que sentido tenia permanecer allí, si estaba sola? ¿Por qué siempre ocurría esto? ¿Por qué se marchaba? Las ideas cruzaban su mente como estrellas fugaces en un oscuro cielo despejado, brillando solo un instante para ceder lugar al resplandor de la que viene tras de si. Entonces una luz brillo mas que las otras, esta vez tenia un punto de inicio, y algo en lo que encaminar sus pensamientos erráticos antes de precipitarse a un estado depresivo.

- esa llamada, se fue por esa llamada- pronuncia las palabras lentamente esperando que el sonido les diera sentido, a todas las piezas del rompecabezas. Era la primera vez que tenia algo donde empezar, pero ¿Quién había llamado? ¿algún amigo?¿familia?, no, no habría contestado de la forma en que lo hizo ¿o si? ¿Cómo saberlo?, entonces la idea que ninguna amante que se crea feliz debería pensar cruzo por su mente, otra, ¿podría Elliot tener otra?
No, rechazo la idea con vehemencia, a pesar de los misterios que su novio siempre parecía mantener, se negaba a creer que tenia a otra, a pesar de que no tenia ningún argumento razonable, no quería pensar en ello, se levanto de la cama donde se encontraba, saco el whisky del minibar y se sirvió un vaso con solo dos cubos de hielo, siempre le habían gustado los tragos fuertes, y se sentó en el balcón a observar el atardecer, se le había ido el dia en un instante, ya no quería pensar, solo deseaba que la brisa marina se llevara sus pesares con ella.

Un recuerdo cruzo su mente dibujando las imágenes entre las nubes del horizonte tan real como si lo estuviera viviendo de nuevo

Aquel dia no era whisky lo que estaba en mi vaso sino tequila – penso-, era viernes y había tenido un dia agotador, asi que me fui a pasar un rato en un bar para despreocuparme del mundo, ya llevaba un rato ahí cuando le vi ahí sentado en un sillón totalmente solo, me llamo la atención al instante, llevaba una camisa azul marino desabrochada hasta el tercer botón del cuello, el cabello desordenado y un cigarro en la boca. De pronto levanto la vista y nuestras miradas se cruzaron, aparte la vista con un gesto atrayente, siempre e sabido lo atractiva que resulto a los hombres, tanto que el mismo trago que bebía había sido un obsequio de uno de esos intentos burdos de conquistador, pero el parecía diferente, uno de esos tipos que sabe lo que quieren, y a mi me gusto, empezó el juego de conquista, pensé.

Estuvimos un buen rato entre miradas escondidas y gestos sutiles, ambos jugábamos el mismo juego, y para mi sorpresa yo perdí, me canse de esperar, termine mi trago y me dirigí hacia el.

-Buenas noches- dijo el con un sonrisa que revelaba lo satisfecho que estaba con mi presencia, me senté a su lado sin decir palabra, pero sin dar gesto de timidez, quería ver que tenia para ofrecer y el me complació
-Asi que la encantadora señorita decidió acompañar al hombre que no cedió a sus encantos- exclamo mirando al techo de forma despreocupada. Me fascino la forma en que hablaba, no era común encontrar hombres con ese lenguaje en lugares como estos, pero no se lo deje notar, quizás era una técnica de conquista que llevaba años ensayando, hoy en dia no me fió de nada.

-¿a que te refieres?- pregunte del modo mas inocente que pude
- habían tres tipos muy cerca de ti que deseaban seducirte, uno de lo cuales te invito el trago que bebías cuando me viste, y habían otros dos en la periferia con iguales propósitos- lo dijo todo sin apartar la vista del techo, me dio la impresión de que podía ver la escena completa en su mente
-¿ me estabas vigilando?- exclame ofendida- ¿debería sentirme alagada o temerte?
-¿ah?- se sorprendió, fue de lo mas encantador, no podía creer que hasta ahí llegaba su fachada de conquistador
-a decir verdad- continuo mientras encendía otro cigarro- deberías temerme, pero no quiero que lo hagas, me pareces muy linda, ¿Qué tal si empezamos de nuevo? Mi nombre es Elliot- exclamo mientras me alargaba una mano, no pude evitar reír
-¿dije algo malo?
- No- respondí entre risas- es solo que toda la fachada de seductor, y la pose de galán, para luego decir, “me equivoque, empecemos de nuevo “ la escena en si es algo cómica
-Supongo que tienes razón- respondió sin ninguna muestra de que revelara que se avergonzaba de su comportamiento
-lo siento-dije cuando al fin pude parar de reír- mi nombre es Gwen

Fue una noche de lo mas peculiar, nos la pasamos hablando del mundo, de las personas, de las relaciones humanas y de todo cuanto se nos pasara por las cabezas, ahora que lo pienso incluso en ese momento ya desinhibidos por el ambiente, y con bastante alcohol en nuestras venas el fue lo bastante precavido como para no revelar nada de si, aunque para ser sincera yo tampoco lo hice no me gusta hablar mucho de mi vida.
Entonces ya quedaba poco para amanecer, y nos echaron del bar, no despedimos en la puerta, ya que tomábamos direcciones opuestas

-Fue un placer conocerte- exclamo él- a sido una noche divertida
-Lo mismo digo
-Buenas noches- me dedico una sonrisa de despedida, dio media vuelta y empezó a caminar
-Espera- lo detuve,
-¿si?
-¿no quieres mi teléfono?- pregunte sorprendida, el me miro extrañado, y luego volvió a sonreírme
-claro-fue lo ultimo que me dijo, le entregue el numero y se marcho sin quitar la sonrisa de tus labios, como me hubiera gustado saber que pasaba por su mente

como me gustaría saber que pasa por tú mente, pensó mientras miraba al cielo posando sus ojos en las estrellas, ya estaba entrada la noche, no sentía le paso del tiempo cuándo se inundaba en sus recuerdos, intento levantarse pero tenia los miembros entumecidos, ni modo, se arrastro como pudo para salir del balcón, empezaba a hacer demasiado frió, se arrojo a la cama e intento dormir.


***

Ya estaba entrada la noche cuando Elliot toco a la puerta, prefería esa hora, no deseaba ser visto por el barrio, nadie respondió, asi que decidió revisar si su vieja llave aun funcionaba. La puerta abrió al instante, estaba oscuro, la casa parecía estar vacía. Entonces se prendió la luz

-¡Elliot!- exclamo una voz masculina, que se aproximaba para abrazarlo- ¿Cómo estas amigo?
-Greg – musito sin comprender del todo que ocurría
-¿Qué pasa Elliot?¿por que esa cara?
-¿Cómo estas? - Inquirio sin responder a sus preguntas
-bien, bien, estoy en excelente forma
-¿y ella?- pregunto con la mirada turbada
-excelente, no paso nada
-¿entonces?
-este… bueno, sabia que no vendrías sino te decía que había problemas, y como hace mas de dos años que no te veía…-Elliot comprendió todo al instante
-Hay formas menos alarmantes de ver a los viejos amigos Greg- exclamo algo molesto
-Vamos no te enfades, sebes que no lo hago con mala intención, solo me preocupo por ti
-lo se, pero hubiera preferido que no me hubieras hecho venir hasta aquí-respondió con una sonrisa triste
-Lo siento, pero bueno ya estas aquí, no hay mucho que hacer al respecto
- adios Greg- exclamo mientras se volteaba en dirección a la puerta
-Vamos Elliot, no te pongas asi quédate
-tengo una vida ocupada y lo sabes- respondió pensando en Gwen que lo esperaba
-¿mn?- Era fácil para Greg notar cuando su amigo andaba en algo, y esto parecía bueno –Al menos esta noche- Elliot dudo y Grez aprovecho la oportunidad para interponerse ante la puerta
-Solo esta noche- puntualizo Elliot, después de todo hace mucho que no veía a su amigo y por importantes razones, Greg le conocía demasiado bien
-Excelente- exclamo victorioso
-pero solo esta noche- sabia bien que si le daba la oportunidad lo haría quedarse una semana
-¿una cerveza?- sugirió el entusiasta mientras se dirigía al cocina
-Claro- respondió Elliot mientras pensaba por que no, esta promete ser una larga noche.


7 comentarios:

Alejandro Marcos Ortega dijo...

Muy largo el capítulo, la lectura se hace algo engorrosa por lo estrecho de la columna, pero en general bien, sigues manteniendo elmisterio y la emocion a la vez q vas contando cosas de su pasado.

andrés dijo...

Me gustó mucho y si es verdad es muy largo pero eso en lo particular no me molesta porque cuando leo no hay tamaño ni forma a vecess, no sabes lo mucho que me costo comenzar una novela, aunque he avanzado mucho la sigo ecribiendo, espero que puedas seguir manteniendo ese orden y tan buena prosa en los demas capitulos, seguro que ser{a asi ya que has demostrado que lo ahces muyy bien

saludos!!!

El peregrino dijo...

Creo que es la primera vez que me paso por aquí. Gracias por la larga lectura. Creo que te enlazaré para poder seguir visitándote.
Saludos desde Bogotá.

Exhalación dijo...

A pesar de la profunda extensión de la escena me parecio excelente, sobre todo porque fue in creccendo, mejor al final que al principio, sobre todo en la manera de hacer incapié en los sentimientos de los personaje...

beri greatt

Seo dijo...

y que quire greg de elliot? me sigues dejando intrigada. lo unico que objetar es lo extenso del capitulo,por el resto bien.

saludos

El peregrino dijo...

Gracias por el comentario. Ya está lo del enlace. Si te parece, también puedes enlazarme.
Seguiré por aquí.

Ms. Davis dijo...

jajaja, lo cierto es que greg si busco a Elliot por un motivo en especifico, pero no tengo prisa por revelarlo XD