jueves, 21 de mayo de 2009

pregunta abierta

es de débiles, al menos así esta insertado en mi mente…

Cortarse, dejar que la sangre escurra por los miembros y calme por un instante dolor que te desgarra dentro del alma, Es de débiles, si uno sufre por sus actos, o por hechos incontrolables, debe asumir su dolor y vivirlo, impedir ese proceso de cualquier forma, es para aquella gente que no tiene la capacidad de resistir

Puede que sea crudo pero así lo creo

Es lo mismo cuando al gente comenta sus penas al mundo, es de débiles, por que pides ayuda a otros para resistir tu dolor, si yo fuera a matarme no se lo diría a nadie simplemente lo haría

Escuchaste mis palabras y me entregaste el cuchillo que ahora tengo en mis manos, me dejaste sola

Que esperas que haga amor?

5 comentarios:

Seo dijo...

no creo que sea de cobardes, pero si creo que debe ser la ultima opcion. esta vida no es facil(ya leiste mi texto) y hay que saber llevarla lo mejro posible.

te agregó al msn

un beso y ya hablaremos

Fernanda Cobain Holopainen ♥ dijo...

quizas sea del punto donde lo mires...quizas no...si estuviera a punto de suicidarme tambien pensaria que soy un cobarde.

Despues de un año vuelvo xDD...

Saludos

El peregrino dijo...

Ánimo con el cuchillo. Introdúcelo pronto bien adentro y acaba con todo. Que tu sangre se vuelva palabra y que tu palabra se haga literatura.
Saludos.

andrés dijo...

Yo pienso que la debilidad es una sumisión asquerosa, es sucumbir a tus ideales, es un facilismo, en lo personal lo que dices no es debilidad pero en parte sí, es un tira y afloja, una contradiccion logica.

Un abrazo enorme y veo que me perdí tu entrada, creo que las actualizaciones estan mal.

Un saludo enorme

andrés

Dark K dijo...

La debilidad es inherente al ser humano, es el refugio donde somos realmente capaces de mirarnos al espejo y reconocernos como sujetos incapaces de cruzar la lìnea si no tenemos a alguien a nuestro lado. Y el dolor es tan atàvico, tan consistente, tan ilógico, tan magnánimo, que la mayoría del tiempo debemos encontrar la forma de extirpalo. Algunos dibujan, otros se ejercitan, otros leen, y algunos de nosotros escribimos. Pero ¿què hacer cuando el papel y el lapiz no son màs que unas marionetas que se ríen en la cara de la función indómita que queremos darle? ¿Qué hacer cuando la pluma evade nuestra mano, como recordándonos que la única tinta válida es la sangre? ¿Qué hacer cuando el papel en blanco frente a nosotros se niega a ser violado con tinta? "La memoria es borrosa. Por eso escribo: para que no se borre"... y pocas cosas permanecen más en la memoria que los escritos tormentosos en mis brazos...